Cuando vamos a una tienda a comprar una tortuga, lo normal es contemplar un tanque con un montón de pequeñas y ágiles nadadoras, de caparazones en tonos verdes, amarillos o grisáceos en distintas intensidades y dibujos. Hoy en día suelen estar mezcladas varias especies, todas compatibles entre sí. Es fácil encontrar la Tortuga mapa de Mississippi, la Falsa mapa o las de vientre rojo del género Pseudemys. Todas similares a la que se hizo tan famosa: la Tortuga de oreja roja o de Florida, prohibida en la actualidad.
También podemos optar por otras especies más originales que, si no las encontramos directamente en la tienda, las podemos encargar, aunque el precio también será más elevado. Las variedades son muchas, algunas tan espectaculares como las Tortugas de caparazón blando, con nariz en forma de trompa, galápagos mordedores, etc.
A la hora de decidir el número de ejemplares que queremos comprar tendemos a pensar que comprar dos tortugas va a ser mejor que una sola, así se hacen compañía. Tengamos en cuenta que las tortugas por naturaleza son bastante territoriales y sólo se juntan para la procreación. En cautiverio se adaptan bien para compartir su habitáculo con otros congéneres, pero sólo si disponen del suficiente espacio como para tener un poco de intimidad. Cuando son muy pequeñas (las compramos cuando son bebés) no hay ningún problema, pero si al cabo de unos años los animales crecen y no adecuamos el recipiente a sus necesidades, sufren más que disfrutan de la compañía de otras tortugas.
Las elegiremos de aspecto saludable: caparazón brillante, sin zonas mates, y bien duro, patas y dedos en buen estado, ojos bien abiertos, oscuros, brillantes y que al dejarlas en el tanque naden veloces escapando de nuestra mano.
Una vez adquirida una mascota ésta debe convivir con nosotros hasta el fin de sus días. Si por alguna circunstancia especial nos resulta imposible continuar haciéndonos cargo de ella tenemos que buscar a alguien que la cuide y si no es posible, antes que dejarla abandonada, hay que practicarle una eutanasia.