- Evitar muestras de cariño demasiado efusivas (besos en la boca de la mascota).
- Lavarnos las manos después de tocar a los animales y especialmente antes de comer.
- No debemos permitir que duerman dentro de nuestra cama.
Estas medidas preventivas deben llevarse a cabo de una manera más rigurosa cuando las personas que van a convivir con las mascotas sean niños inmunodeprimidos (con leucemia, SIDA, etc). En algunas ocasiones, dependiendo del caso, está contraindicado su convivencia con ciertos animales.